A 31 AÑOS DEL ATENTADO A LA AMIA: ACTOS SIMULTÁNEOS Y DEBATE POR EL JUICIO EN AUSENCIA

El 18 de julio de 1994, a las 9:53 de la mañana, un coche bomba cargado con entre 300 y 400 kilos de explosivos estalló frente a la sede de la AMIA, ubicada en Pasteur 633, en el barrio porteño de Once. La explosión destruyó el edificio, causó 85 muertes y dejó más de 300 personas heridas.

Este viernes a las 9:30 se realizarán dos actos simultáneos en la Ciudad de Buenos Aires para conmemorar un nuevo aniversario del atentado a la AMIA, el ataque terrorista más grave de la historia argentina. 

En Pasteur 633, epicentro del atentado, tendrá lugar la ceremonia oficial organizada por la AMIA y la DAIA, que contará con la presencia del presidente Javier Milei. En paralelo, la agrupación Memoria Activa encabezará su propio homenaje en Plaza Lavalle, con una mirada crítica sobre el rumbo de la causa judicial.

Ambas ceremonias comenzarán con la lectura de los nombres de las 85 víctimas fatales y el tradicional sonido del shofar, símbolo de duelo y memoria. Aunque comparten el homenaje, los actos reflejan posturas divergentes frente a un punto clave: el juicio en ausencia.

En el acto central, frente al edificio de la AMIA, se desplegará un operativo de seguridad reforzado por parte del Gobierno nacional, en un contexto de tensión diplomática con Irán. Será la primera aparición conjunta de Milei con el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, tras el episodio del 25 de mayo cuando el presidente evitó saludarlo durante el Tedeum en la Catedral.

Aunque Milei asistirá junto a su hermana Karina y parte del gabinete, no está previsto que brinde un discurso. También se espera la llegada de una delegación oficial proveniente de Israel.

Durante la ceremonia hablarán el presidente de la AMIA, Osvaldo Armoza, un familiar de una de las víctimas, y se presentará el cantante Tripa. La conducción estará a cargo de Mariana Fabbiani. Uno de los ejes del acto será el respaldo explícito al juicio en ausencia, recientemente habilitado por ley, para avanzar en la acusación contra siete ciudadanos iraníes y tres libaneses señalados por la justicia argentina como responsables del atentado.

Además, se reiterará la condena al terrorismo internacional, con menciones a la masacre perpetrada por Hamas en Israel en octubre de 2023 y a Irán como supuesto instigador.

Plaza Lavalle: homenaje con cuestionamientos al juicio en ausencia

En paralelo, a la misma hora en Plaza Lavalle, frente al Palacio de Tribunales, se desarrollará otro acto encabezado por Memoria Activa, junto a agrupaciones como APEMIA y el Llamamiento Argentino-Judío. Allí también se recordará a las víctimas, pero con una postura crítica frente al juicio en ausencia.

Estas organizaciones sostienen que ese mecanismo busca cerrar la causa sin pruebas suficientes y responde más a intereses geopolíticos que a una búsqueda genuina de justicia.

Entre los oradores estarán la referente de Memoria Activa, Diana Malamud; el sociólogo y docente de la Universidad de Columbia, Kevin Ary Levin; y el periodista Ariel Zak.

Debate judicial: apelaciones y una audiencia clave en agosto

El debate por el juicio en ausencia también llegó al plano judicial. Aunque el juez Daniel Rafecas lo impulsa como herramienta para evitar la impunidad, tanto APEMIA como el defensor oficial Hernán Silva presentaron recursos en contra.

El próximo 8 de agosto está prevista una audiencia ante la Cámara Federal para tratar las apelaciones. APEMIA ya presentó un escrito de 27 páginas en el que rechaza el procedimiento, por considerarlo violatorio del debido proceso.

El atentado, aún impune

El 18 de julio de 1994, a las 9:53 de la mañana, un coche bomba cargado con entre 300 y 400 kilos de explosivos estalló frente a la sede de la AMIA, ubicada en Pasteur 633, en el barrio porteño de Once. La explosión destruyó el edificio, causó 85 muertes y dejó más de 300 personas heridas.

El ataque ocurrió dos años después del atentado a la Embajada de Israel en Buenos Aires, que dejó 22 muertos y más de 200 heridos. Ambos hechos están marcados por la impunidad, las irregularidades judiciales y las denuncias por encubrimiento.

La principal hipótesis apunta al grupo Hezbollah, con apoyo del régimen iraní. Sin embargo, a más de tres décadas del atentado, no hay condenas firmes ni responsables detenidos en Argentina. Los familiares de las víctimas siguen reclamando justicia.

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