Cancillería presentó la denuncia oficial por la «detención arbitraria y desaparición forzada» de Nahuel Gallo.
Desde Cancillería remarcaron que la detención forzada de Gallo “constituye una violación grave y flagrante de los derechos humanos, evidenciando un patrón sistemático de crímenes de lesa humanidad que se están cometiendo en la República Bolivariana de Venezuela”.
En ese sentido, se dirigieron a la Corte Penal Internacional remarcando que los hechos se encuentran claramente bajo su jurisdicción.
“El Gobierno argentino continuará utilizando todos los recursos legales y diplomáticos para garantizar los derechos del ciudadano Nahuel Gallo, proteger los derechos humanos y exigir justicia internacional”, cierra el comunicado oficial de Cancillería emitido hoy.
La semana pasada el fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, sostuvo que el gendarme argentino Nahuel Gallo “se encuentra bien de salud y su integridad ha sido respetada como obliga la ley y la Constitución».
Pese a que la familia del gendarme insiste en que el viaje lo realizó exclusivamente para reencontrarse con su pareja y su hijo, en medio de sus vacaciones, el fiscal general se mantuvo firme en su postura e indicó que Gallo «está siendo investigado y procesado por delitos extremadamente graves» contra la paz en Venezuela.
Días atrás, Diosdado Cabello fabuló que Gallo había ingresado a su país para articular “una operación de extracción” de los seis dirigentes opositores venezolanos que se encuentran refugiados en la Embajada de nuestro país en Caracas.
“Al parecer, el coño (tipo) ese que agarraron entrando en la frontera, de nacionalidad argentina, es un agente especial de los servicios de inteligencia de ese país”, agregó el ministro.
Además, el canciller venezolano Yván Gil anunciaba que el gendarme argentino detenido está siendo procesado por “terrorista», argumentando que intentó infiltrarse a suelo venezolano para perpetrar “un plan terrorista”.




