En un contexto de subas constantes en las tarifas de servicios, el cuidado del consumo eléctrico se vuelve clave para el bolsillo de los hogares argentinos. Día a día, se utilizan múltiples electrodomésticos y aparatos eléctricos que hacen más cómoda la rutina, pero también pueden generar costos innecesarios si no se usan con conciencia.

Uno de los principales enemigos del ahorro energético es el llamado «consumo silencioso» o «consumo fantasma»: se trata del gasto de electricidad que producen ciertos aparatos incluso cuando no están en uso, pero siguen enchufados a la corriente.

¿QUÉ ELECTRODOMÉSTICOS DESENCHUFAR PARA AHORRAR?

1- Televisores y consolas de videojuegos: estos dispositivos cuentan con una particularidad especial, ya que además de energía, precisan wifi, por lo que el consumo puede aumentar si se mantienen enchufados. Al desconectarlos, se podría ahorrar hasta un 40% del total de la factura mensual.

2- Microondas, cafeteras y electrodomésticos de cocina: si bien durante la noche se encuentran en desuso, algunas funciones pueden consumir más energía, como el reloj digital o el panel de opciones que se muestra en algunos. Por otra parte, otros aparatos como las cafeteras, las licuadoras y las tostadoras también pueden consumir energía en modo fantasma.

3- Cargadores y cepillos eléctricos: desenchufar el cargador puede ser determinante a la hora de ahorrar energía, y lo mismo ocurre con los cables de computadores, cepillos y afeitadoras. Las famosas multitomas también consumen de esta forma, por lo que hay que desconectarlas mientras no se usan.