LLA espera definiciones desde la Casa Rosada y De Loredo se desespera por no quedar afuera del Congreso.
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Macri: «LLA pretende una posición dominante, pero la prioridad del PRO es ayudarlos a gobernar»
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Se estira definición de alianzas y el PRO evalúa las condiciones que busca imponer LLA

Natalia de la Sota rompió y le puso fin a la estrategia electoral que diseño su padre para el peronismo, hace 27 años.
La noticia tomó por sorpresa al Panal, como se conoce a la Casa de Gobierno de esta provincia, aunque se señala que las últimas decisiones del tándem Llaryora – Schiaretti «empujaron la decisión de De la Sota», quien sostiene una postura crítica pública en contra de la Casa Rosada. La falta de diálogo al borde del cierre de la inscripción de las alianzas y a días de la presentación de las listas, provocaron la ruptura de la parlamentaria que va por su reelección. Por el alto nivel de conocimiento se descuenta que De la Sota buscará pescar votos en el mismo electorado que apoya a Llaryora pero que tiene una mirada crítica de las políticas libertarias.
Con el sello del león
LLA pareciera tener el camino allanado hacia las legislativas nacionales y si dependiera de los principales referentes del partido, Gabriel Bornoroni, presidente del bloque de diputados libertarios en Diputados, y la legisladora nacional Celeste Ponce, esa fuerza jugaría con «leones puros» en La Docta. Pero no. Se sabe que los acuerdos alcanzados con el PRO y sectores de la UCR en Provincia de Buenos Aires y en la Ciudad de Buenos Aires, podrían replicarse en este distrito. «Nada está cerrado, se hará lo que quieran Javier y Karina», es la frase que se repite, por lo que se espera con expectativas los movimientos de las próximas horas.
Una alta imagen positiva acompaña al presidente Javier Milei en Córdoba, que ronda el 45%, según los sondeos, razón suficiente para que el oficialismo que manda en el radicalismo cordobés haya hecho lo necesario para cerrar un acuerdo con LLA. Su abanderado es el diputado nacional Rodrigo de Loredo, a quien se le termina el mandato en diciembre, y pretende ir por la reelección. A su favor, esgrime que el bloque UCR de la Cámara Baja -que preside- acompañó el 90% de los proyectos que envió la Casa Rosada al Congreso. Sabe que el objetivo de continuar con una banca sería lejano con la UCR sumida en una interna, que también se dirime en la Justicia, por lo que dialoga con espadas libertarias. El precio de un hipotético acuerdo para estar en la nómina le costaría ir en un tercer lugar, de máxima, se indicó.
Otro elemento que se sumó en la recta final hacia el plazo que vence este jueves es la decisión de la Cámara Nacional Electoral, que ratificó un fallo en contra de la intervención del PRO cordobés, una pésima noticia para el expresidente Mauricio Macri, que la había decidido el año pasado y prorrogado hasta fin de año para negociar con la Casa Rosada. De este modo, el diputado nacional Oscar Agost Carreño volverá a tener el sello de presidente del partido, un crítico de la gestión del presidente Javier Milei.
Pero eso no es todo, Agost Carreño también impulsó una de las denuncias por la estafa $LIBRA, una causa que toca al propio Javier Milei y a su hermana Karina. Además, este diputado mantiene un buen vínculo con Llaryora, lo que incomodó desde siempre a Macri. Se sabe que el parlamentario pretende ir por la reelección y que la devolución del sello de presidente del PRO podría obturar un entendimiento entre LLA y el macrismo, tal como se acordó en CABA.




