El titular del IIFA destacó que con los equipos del instituto se realizan recorridas por el interior y, en “algunos municipios, firmando acuerdos de arbolado urbano, como fue el caso del día lunes en Charata, y también haciendo arbolado de instituciones para acompañar a la comunidad”.

En las visitas, también se reúne con productores del sector forestal para exponer “un nuevo concepto de forestación” y trabajar en “el valor agregado de lo que hasta aquí eran considerados residuos forestales”.

“Cuando visitamos una comunidad, aprovechamos para generar reuniones con las asociaciones de productores forestales. Tuvimos una reunión hace quince días en Sáenz Peña con todas las asociaciones. La idea del encuentro fue plantear un nuevo concepto de forestación, dado que las forestaciones se realizan a través de la Ley 25080 que apoyaba con subsidios y que actualmente está desfinanciada”, expuso Favarón desde los estudios de CIUDAD TV.

La propuesta del organismo es “empezar a coordinar estrategias para empezar a sembrar lo que luego van a cosechar ellos”. “Desde ya se necesita reforzar porque evidentemente las políticas forestales en el Chaco no han sido muy efectivas. El Chaco ha forestado cinco mil hectáreas mientras las provincias mesopotámicas, en el mismo periodo de tiempo, lo han hecho en más de un millón trescientas mil hectáreas”, señaló y apuntó que “el Chaco antiguamente tenía una tasa forestación baja pero lideraba dentro de las provincias no mesopotámicas. Hoy, Santiago del Estero y Formosa nos han superado en esa tasa, en los últimos años el Chaco ha quedado muy atrasado”.

“Estamos generando acciones para revertir eso y expandir el sector forestal”, aseguró el titular del IIFA y planteó concebir al “bosque implantado no solamente desde el aprovechamiento del algarrobo como materia prima para la industria del mueble sino como un concepto integral. Pensar el algarrobo en un concepto foresto ganadero, donde la forestación eleva la productividad ganadera”.

En ese sentido, afirmó que se está “trabajando con los productores forestales en generar valor agregado a eso que hasta aquí eran considerados residuos forestales. También estamos trabajando en los proyectos de carbón activado, donde se puede aprovechar la rama de 3 centímetros a 10 centímetros, que antes eso se desaprovechaba porque en un horno de carbón eso se hacía ceniza, hoy hay nuevas tecnologías que permiten aprovechar esto; también a este bosque implantado, combinado con ganadería y con estos aprovechamientos de lo que antiguamente eran residuos, hay que combinarlos también con lo que hoy podrían ser bonos de carbono”, detalló sobre el plan del instituto.

“En las últimas reuniones que hemos realizado con las distintas asociaciones, se mostraron muy interesados, muy dispuestos a absorber información, a absorber este cambio conceptual porque solamente pensar al sector forestal desde el punto de vista de la explotación del bosque nativo, de la extracción, no es sustentable a largo plazo, tenemos que empezar a planificar el reemplazo de eso por bosques implantados”, aseveró Favaron.