El biólogo Julián Valdés explicó por qué aumenta la presencia de alacranes en esta época del año y brindó recomendaciones para prevenir accidentes. Describió hábitos, condiciones de aparición, riesgos en la salud y características de las especies presentes en la provincia.
El doctor en Biología, Julián Valdés, explicó en diálogo con CIUDAD TV las razones por las cuales la presencia de alacranes se vuelve más frecuente durante la temporada estival. “Aparecen bajo dos condiciones: la primera es oscuridad y la segunda es la alta temperatura”, señaló. Indicó que estos animales dependen de la temperatura ambiente, lo que activa su metabolismo, aumenta la necesidad de alimento y les otorga mayor capacidad de movimiento.
Valdés comentó que suelen encontrarse en zonas oscuras y húmedas, especialmente en desagües. “Por lo general están en los desagües, donde habitan estos animales. Después pasan a la vivienda por rejillas o por rendijas de estos sistemas”, explicó. Por este motivo, recomendó extremar cuidados durante la noche. “Si nos vamos al baño de noche, que ya lo hacemos descalzos o con un calzado liviano, prender las luces y ver bien dónde caminamos”, añadió. También sugirió usar calzado adecuado al transitar por zonas de pasto y evitar acumulación de objetos que puedan funcionar como refugio.
Respecto a las picaduras, señaló que cada profesional trata el accidente según el cuadro, pero remarcó la necesidad de especial atención en la franja etaria de mayor riesgo. “En Argentina se producen alrededor de 8.000 casos de picaduras de alacranes por año. Esto genera un promedio de dos muertes, y esas muertes son generalmente en niños. Lo que tenemos que cuidar es esa franja etaria de 0 a 10 años”, indicó.
Al referirse a los hábitos reproductivos, explicó que los alacranes no necesariamente aparecen en grupo. “Solamente en el periodo reproductivo se pueden encontrar machos y hembras juntos”, dijo, aunque recordó que existen especies en la región cuyas hembras pueden reproducirse sin machos. Aclaró que, si se observa más de un ejemplar, no se debe a una convivencia entre ellos sino a que “hay una zona en la casa con condiciones propicias para que haya varios animales”.
Sobre las especies presentes en la provincia, Valdés indicó que “en el Chaco tenemos una buena diversidad de especies de escorpiones”. Aunque todas poseen veneno, no todas representan riesgo sanitario. Sin embargo, las especies peligrosas están más adaptadas a la vida domiciliar. En el caso de Resistencia, la especie de mayor importancia médica es el Tityus trivittatus. “Tiene tres líneas negras en el lomo, que es lo más fácil de ver a una distancia prudencial”, describió, aunque advirtió que existen otras especies similares capaces de causar envenenamiento.
Consultado sobre su comportamiento dentro de las viviendas, aclaró que no forman nidos. “Por lo general suelen recorrer más y no volver a un mismo sitio”, afirmó, y destacó que lo importante es identificar y eliminar los lugares que ofrecen condiciones favorables para su presencia.
Por último, mencionó que las mascotas también pueden verse afectadas. “Son más propensos los perros por la conducta de olfatear. Son más propensos a ser picados que los gatos”, señaló.
Valdés insistió en la importancia de la prevención y del control de los espacios de riesgo, especialmente en hogares con niños pequeños.

